En la mañana del 6 de septiembre, tras coordinar el transporte, el personal embaló el banco de carga resistivo puro de alta tensión de 5 MW en el sitio. Lo envolvieron herméticamente con dos capas de tela impermeable para minimizar daños innecesarios durante el transporte. Debido a su gran tamaño, su traslado generó mucha presión y dificultad. Con la ayuda de herramientas auxiliares como carretillas elevadoras y grúas, finalmente se colocó en el camión de transporte y ya se envió al cliente.















