Antes de profundizar en la necesidad de cargas ficticias en el mantenimiento del sistema de energía, analicemos cuál es la necesidad de realizar pruebas de carga ficticia.
Técnicamente, una prueba de carga ficticia es la mejor manera de verificar el correcto funcionamiento y la autonomía de las baterías de un sistema SAI. Esta prueba evalúa el funcionamiento del SAI y los generadores en diversas condiciones de carga. Además, garantiza la fiabilidad del sistema eléctrico al 100 %. Además de la prueba de carga ficticia, esta también desempeña un papel fundamental en la detección de fallos y el mantenimiento de los sistemas eléctricos.
¿Cómo funciona una carga ficticia en relación con un sistema de energía?
Una carga ficticia móvil, al igual que su otra variante, suele contener resistencias de alta resistencia que imitan la carga eléctrica de una red eléctrica real. Utiliza elementos resistivos para disipar la energía eléctrica generada en forma de calor. El calor generado se elimina mediante un ventilador integrado en la carga ficticia.
Una vez realizada una prueba de carga ficticia, se recopilan lecturas durante la descarga y se registra el rendimiento de la batería y del sistema. Una prueba de carga ficticia típica puede ayudar a identificar problemas con el SAI y los generadores, si los hubiera, y a ayudar a las partes interesadas a tomar medidas inmediatas para mejorar su funcionalidad y eficiencia.
Importancia de la carga ficticia en el sistema de suministro de energía
Fundamentalmente, se requiere una prueba de carga ficticia para evaluar el estado de la fuente de alimentación y sus componentes y garantizar su óptimo funcionamiento. Por lo tanto, las USP y los sistemas de alimentación deben someterse a pruebas de carga ficticia periódicamente para garantizar que alcancen su máximo potencial cuando sea necesario. Además, la prueba de arrendamiento de carga ficticia ayuda a:
Facilita la fabricación y pruebas de instalación de sistemas de energía:
Las pruebas de carga ficticia en la fabricación e instalación de sistemas eléctricos permiten evaluar cada componente del sistema. Esto garantiza que todos los componentes alcancen su máximo potencial y estén sincronizados entre sí. También garantiza que todos los componentes funcionen conjuntamente según lo previsto y diseñado. La prueba también ayuda a identificar posibles debilidades de manera oportuna.
Facilita el mantenimiento preventivo regular:
El mantenimiento preventivo regular de los sistemas eléctricos debe incluir pruebas de carga simulada. De lo contrario, se pueden generar altos costos operativos, desgaste excesivo y un aumento de las emisiones. Las pruebas de carga ayudarán a garantizar que el sistema generador pueda producir plena carga sin apagarse ni sobrecalentarse. También ayudarán a identificar puntos débiles en condiciones controladas sin exponer a la compañía eléctrica a ningún riesgo potencial de interrupción.
Ayuda a eliminar la acumulación de humedad:
Los motores diésel suelen verse afectados por la acumulación de humedad, un problema causado por la entrada de combustible no quemado en el sistema de escape. La acumulación excesiva de combustible no quemado en el sistema de escape puede reducir significativamente su capacidad de rendimiento. Las pruebas de carga simulada eliminan la posibilidad de acumulación de humedad.
Además, ayuda a cumplir con diferentes normativas regulatorias.